DOLLY GUZMAN NO ESTA LOCA – mayo 2011

Excelente. Mónica Cabrera da vida a su personaje Dolly Guzmán y desarma desde el humor muchos de los miedos de los actores y las personas con imagen pública. Del reconocimiento al olvido y la despersonalización.

Al personaje, la cantante Dolly Guzmán, se le hacen realidad los peores presagios para un personaje público: que se aprovechen de tu nombre, que investiguen en su pasado y manipulen la investigación, que su médico hable en televisión, olvidarse de todo lo que iba a decir, no recordar información alguna, que no te reconozcan sus amigos, que secuestren a su perro, que manipulen para su mal un reportaje, que su imagen sea destrozada por un programa periodístico…. Sobre todo que no la escuchen, que nadie de verdad atienda sus necesidades y que utilicen su persona o su imagen sin ningún respeto.

El vestuario es genial, incluyendo un cerebro de colores con chispas luminosas y ropa con toques vintage. Muy buena la realización escenográfica con cuadros y un sarcófago entre otros objetos interesantes (casi una instalación).

Hay video muy bueno que está presente en muchos momentos e ingresa personajes con la estética de la entrevista del talk show con algunos reportajes, el médico como una especie de Gran Hermano que taladra su cabeza, personajes del más allá. Estos videos son la excusa para que se luzca la actriz en el mentido diálogo. Dialogar y ser escuchada es la materia prima de esta obra.

Mónica Cabrera lleva adelante este unipersonal con una energía envidiable e ingresa al texto, con una frescura envidiable, cuestiones de lo que podríamos llamar el menú de las complicaciones cotidianas.

María Inés Senabre

Mónica Cabrera en “¡Dolly Guzmán no está loca!”

Una de las actrices cómicas más importantes del teatro porteño.  Nominada para los premios MARTÍN FIERRO como Mejor actriz de RepartoPor su personaje Mabel en Malparida (Canal 13).  Premio Konex 2011: Unipersonal  En 2009 Mónica Cabrera fue Rosa, la mucama de Tratame Bien, presentó The Victory to la Madrecita en el FIBA, y El Sistema de la Víctima en el Festival Internacional de Cádiz.  Varias de sus obras fueron editadas por Colihue.


Funciones  miércoles y sábados 21hs. en La Carpintería (Jean Jaures 858).

Entrada 60$ descuentos estud. y jub.  $40 SOLO HASTA EL 25 DE JUNIO.

   “¡Dolly Guzmán no está loca!”  Libro, Dirección y Actuación: Mónica Cabrera

Funciones: miércoles 21hs – sábados 20.30hs  Teatro La Carpintería – Jean Jaures 858

Localidades $60 –Desc. Estud. Y jub.440 

La fantasía de la fama, de la trascendencia por el reconocimiento popular, la soledad, la despersonalización y la mirada de los otros, son cuestiones que integran el mundo de Dolly. Nuestro personaje, desde el humor y la música, pone sobre la escena estas cuestiones.

 Dolly es una artista de variedades, cantante de bares y locutora nocturna de programas de tango. En su decadencia, luego de ninguna gloria anterior, finge estar muerta (historia narrada en ¡DOLLY GUZMAN NO ESTA MUERTA!)

Asistente de Dirección: Ana Bonet
Dirección de Arte: Laura Sánchez
Realización Audiovisual y Cámara: Silvana Lopa
Fotografía, postproducción y animaciones: Felicitas Bonino

Producción General: The Cabrera’s Company

Producción Ejecutiva: La Mosca Blanca Producciones

Dirección de Arte y Realización de objetos: Laura Sánchez
Asistentes de Dirección: Ana Bonet / María Clara Cianfagna

Música original: Diego Lozano / Mónica Cabrera

Escenografía: Mónica Cabrera

Obras pictóricas: Bárbara Peisajovich
Réplica de la cabeza de Dolly: Lycanthro FX

Vestuario: Patricia Terán

Diseño de iluminación y fotografía: Felicitas Bonino

Grabación, edición y masterización de sonido: Swami Estudio
Diseño Gráfico: Sergio Prota

 

ESTA ES LA SEGUNDA PARTE DE DOLLY.

Dolly es el personaje que atraviesa situaciones temidas, lindantes entre la realidad, lo onírico y lo policial. A través de ella, puedo discurrir sobre cuestiones sociológicas, históricas y religiosas en torno a la enfermedad mental, el temor a la sanidad y a la enfermedad, las ramificaciones entre ser el que piensa y ser el que hace, o el que observa, o el yo silencioso que realiza lo innombrable.

“¿Cuál yo soy, soy yo?” Se pregunta Dolly en una canción. Y brega durante toda la historia para recuperar su cabeza perdida, que sabe ha pasado a ser propiedad del Dr.Mnemo.

La fantasía de la fama, de la trascendencia por el reconocimiento popular, la soledad, la despersonalización y la mirada de los otros, son cuestiones que integran el mundo de Dolly. Nuestro personaje, desde el humor y la música, pone sobre la escena estas cuestiones.

 Leticia Hernando 4953-7258 / 15 59 19 96 46

TEHAGOLAPRENSA

Deja un comentario